Memoria de Supervisión 2022

25/04/2023

El Banco de España completó el año pasado 146 acciones supervisoras centradas en la protección del cliente bancario, como la vigilancia de la comercialización del crédito al consumo (préstamo responsable, tarjetas revolving y descubiertos tácitos), los servicios de pago (traslado de cuentas, modificaciones contractuales y cuentas de pago básicas) y los préstamos inmobiliarios.

Las acciones supervisoras engloban desde la petición de información a las entidades sobre determinados productos y el control de la publicidad, hasta la visita sorpresa a sucursales de toda España. Y se aplican tanto a la venta tradicional de los productos bancarios, en la oficina, como a su comercialización digital o telefónica.

La supervisión de la Conducta de Entidades es una parte esencial de la función supervisora del Banco de España y se ocupa del cumplimiento de las normas de conducta y transparencia por parte de las entidades y de la protección de su clientela. 

Como resultado de estas actuaciones supervisoras, durante el año pasado se adoptaron las siguientes medidas:

  • 1 expediente sancionador incoado
  • 81 requerimientos de publicidad formulados
  • 25 requerimientos emitidos sobre otras materias, tales como el servicio de traslado de cuenta, crédito inmobiliario y crédito al consumo
  • 57 recomendaciones formuladas sobre aspectos relativos a la información al cliente en oficinas sobre cuentas de pago, la prestación del servicio de traslado de cuenta y el crédito inmobiliario

Recientemente, el Banco de España ha publicado la Memoria de SupervisiónAbre en ventana nueva, donde se recoge toda la actividad de vigilancia micro y macroprudencial, de conducta, la vigilancia y supervisión de las infraestructuras de mercado y el ejercicio de la potestad sancionadora, así como la participación del BE en las instituciones internacionales dedicadas a la regulación y supervisión bancarias.

Dentro del capítulo dedicado a la supervisión de conducta de entidades, se explica cómo las obligaciones de información y transparencia actúan como medidas de protección al cliente para preservar la confianza de los ciudadanos en el sistema bancario y contribuir de esta manera a promover la estabilidad del sistema financiero.

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