Consulta nuestro buscador de oficinas bancarias

03/11/2020

¿Quieres saber qué oficinas bancarias hay en tu localidad? Con este buscadorAbre en ventana nueva podrás localizar de forma sencilla las sucursales que se encuentran más próximas a ti.

En los últimos años, la banca tradicional se ha visto obligada a ajustar su modelo de negocio como consecuencia, entre otros factores, del avance de la tecnología, que permite prestar muchos servicios financieros por canales digitales.

Además de esta revolución tecnológica, la disminución del número de oficinas se debe también a otros factores, como las numerosas fusiones entre entidades, que con frecuencia generan duplicidades de sucursales de las entidades fusionadas.

A finales del año 2008, había en nuestro país 45.662 oficinas bancarias, mientras que en junio de 2020 existían 23.340, lo que supone una reducción de un 49%. Esta reducción se ha notado más en Cataluña, la Comunidad Valenciana y Madrid (con porcentajes de disminución entre finales de 2008 y mediados de 2020, del 61%, 55% y 52%, respectivamente).

A pesar de ello, si comparamos el número de oficinas bancarias por cada 100.000 adultos que hay en España con otros países de nuestro entorno, nuestro país se encuentra todavía muy por encima de la media de la zona euro.  En el año 2019, España contaba aproximadamente con 50 oficinas por cada 100.000 adultos frente a 22 oficinas en la zona euro. Países del entorno como Italia, Portugal, Francia, Grecia y Alemania presentan unas ratios de oficinas inferiores al nuestro.

Para muchos clientes, el cierre de oficinas bancarias no supone un problema ya que prefieren relacionarse con su banco a través de los canales digitales. Esto hace que los bancos estén apostando por mejorar los servicios de su banca digital.

La digitalización de la banca permite a las entidades acceder a más población sin necesidad de tener una red amplia de oficinas, establecer relaciones de negocio de forma fácil con personas que no estaban previamente bancarizadas y tener presencia en aquellos lugares donde no hay oficinas ni agentes comerciales.

Sin embargo y a pesar de que la digitalización permite el acceso a los servicios financieros de un mayor número de personas, nuestra sociedad debe evitar la exclusión financiera de aquellas personas con dificultades para acceder a los canales digitales y establecer los mecanismos adecuados para reducir al máximo los posibles riesgos tecnológicos derivados de la transformación digital.

Aunque reducir la brecha digital es un objetivo global, lo cierto es que siempre habrá ciudadanos para los que por diversas circunstancias les será difícil incorporarse al mundo digital. La avanzada edad, la falta de capacitación digital o el hecho de habitar en entornos rurales con escasa  presencia de oficinas bancarias hace que este problema afecte a un grupo importante de ciudadanos.

Para abordarlo, las entidades están desarrollando otros canales, como las oficinas móviles o los agentes financieros que se desplazan a los lugares donde no hay una oficina bancaria para atender de forma periódica a los clientes.

También establecen acuerdos con otras empresas que tienen una red de establecimientos más extensa para poder prestar algunos de sus servicios financieros, como por ejemplo el ingreso y retirada de efectivo en las oficinas de Correos o la retirada de efectivo en algunos supermercados o gasolineras.

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