Consejos para firmar tu primera hipoteca

20/04/2021

¿Has decidido comprar tu primera vivienda y necesitas, para ello, solicitar un préstamo hipotecario? Preguntas a tus familiares y amigos que ya han firmado una, pero entre el papeleo, los términos que realmente no acabas de comprender y la sensación de vértigo que te produce el estar a punto de tomar una de las decisiones financieras más importantes de tu vida, acabas hecho un lío… Para ayudarte, ponemos en claro algunos aspectos relacionados con tu primera hipoteca que pueden servirte de ayuda:

  • Echa cuentas y sé realista con tu capacidad de endeudamiento. El banco no va a prestarte el dinero si no tiene una seguridad razonable de que vas a poder devolvérselo, y para ello analizará tu solvencia: te solicitará justificación de tu nivel de ingresos, y el tipo de contrato, la antigüedad en la empresa o incluso tu trayectoria son factores que considerará antes de hacerte una oferta. Además, debes tener en cuenta si ya estás pagando alguna otra deuda (por ejemplo, la financiación que pediste para comprarte el coche), porque, en general, las entidades estiman que la tasa de endeudamiento no debe superar el 30-35% de los ingresos de una persona. La entidad consultará tu informe de riesgos (CIRBE) para comprobar qué deudas afrontas en este momento (créditos, tarjetas...).
  • El banco también valorará positivamente que dispongas de algunos ahorros, porque además de demostrar que sabes administrarte, te resultarán más que necesarios, ya que las entidades no suelen conceder más del 80% del valor de tasación de la vivienda. Además, hay gastos relacionados con la operación que deberás afrontar tú.
    Conviene hacer una selección previa de las entidades a las que vas a solicitar información: en sus páginas web encontrarás las condiciones de los diferentes productos ofertados, además de simuladores que te pueden resultar de gran ayuda. También hay comparadores que pueden facilitarte aún más esta tarea. El Banco de España te ofrece simuladores y comparadores para ayudarte.
  • La gran pregunta: ¿tipo fijo o variable? No hay una respuesta clara, objetiva y que sirva para todos. Atravesamos un largo período de tipos de interés bajos que podría mantenerse, pero nadie puede decir hasta cuándo, y debes sopesar que la hipoteca durará muchos años. Antes de tomar la decisión, valora tu situación personal, tus ingresos actuales y tus perspectivas económicas. Además, tu tolerancia al riesgo también tendrá un peso importante en tu decisión.
  • Es habitual que la entidad te presente una oferta que incluya bonificaciones en el tipo de interés según la vinculación que asumas con ella si contratas otros productos o servicios: domiciliación de la nómina y recibos, contratación de seguros y aportaciones a planes de pensiones, por ejemplo. Analiza bien lo que te interesa, su coste y si realmente vas a mantener esa vinculación en el futuro. Si sabes qué cuota deberías pagar sin contar con las bonificaciones, podrás tomar tu decisión de la manera más prudente.
  • La TAE es el elemento fundamental para que compares el precio de tu hipoteca, en la que se deben incluir los intereses, comisiones y gastos del préstamo, así como el coste de otros productos que la entidad pueda exigir para la contratación, como el mantenimiento de una cuenta corriente o de un seguro. Es un dato fundamental que debe aparecer en la información precontractual que tu banco está obligado a facilitarte y en el que debes fijarte para comparar las distintas ofertas de recibas.

 

Los empleados de las entidades deben asesorarte para que puedas tomar una decisión informada y responsable.

¿Te ha parecido útil esta información?