Cómo protegerte de la estafa del pago de las facturas
05/07/2022
El fraude del correo electrónico corporativo, también conocido por sus siglas en inglés como BEC (Business E-mail Compromise), es un tipo de delito que afecta a empresas que realizan pagos de facturas mediante transferencias.
El modo de operación es el siguiente: al intercambiar información sobre facturas a través de correo electrónico, los delincuentes suplantan la identidad del proveedor encargado de remitirlas.
Después, modifican dichas facturas cambiando el IBAN de la cuenta a la que debe realizarse la transferencia de dinero. Así es como consiguen engañar a sus víctimas.
¿Cómo es posible que el ciberdelincuente obtenga información de la empresa, de sus facturas y la dirección de correo del proveedor? Para ello, el delincuente ha tenido que acceder previamente al correo de la víctima, posiblemente descifrando la contraseña.
Si has sufrido una estafa de este tipo y has realizado una transferencia a una cuenta falsa, es importante que contactes con tu entidad lo antes posible.
Las transferencias son mandatos de pago irrevocables y las entidades no están facultadas para ordenar la devolución sin el consentimiento del titular que se ha beneficiado. Ahora bien, de conformidad con las buenas prácticas y usos financieros, a la entidad se le exige que haga esfuerzos razonables para tratar de recuperar el importe transferido, contactando con el banco receptor.
Cada vez se usan métodos más sofisticados que dificultan cada vez más reconocer una dirección de correo falsificada. Puedes encontrar algunos consejos que te ayudarán a desvelar un correo sospechoso en este postAbre en ventana nueva del Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE), donde también podrás encontrar más informaciónAbre en ventana nueva sobre este tipo de fraude.
Consulta nuestra sección Protégete contra el fraudeAbre en ventana nueva para conocer otro tipo de estafas.