Descubierto en cuenta corriente: concepto, información, liquidación y límites
Es habitual y le puede pasar a cualquiera. Ya sea fruto de un descuido o por falta de previsión, en ocasiones los pagos y reintegros pueden dejar tu cuenta en números rojos. Pero, ¿qué repercusiones puede tener?
Los números rojos o descubiertos en cuenta corriente son, en definitiva, un crédito que tu banco te concede para evitar situaciones como los impagos de recibos o la falta de saldo. Puede que lo hayas pactado de forma expresa con tu banco, pero en muchas ocasiones este los concede a su voluntad, sin contar con tu autorización explícita.
En este segundo caso, hablamos de descubiertos tácitos y, si eres consumidor, cuentas con una serie de derechos y obligaciones que debes tener presente:
- Tu banco te puede cobrar por el descubierto las comisiones e intereses que tengas pactados en tu contrato.
- La comisión por descubierto:
- Generalmente se aplica sobre el descubierto mayor de todo el período de liquidación
- Es incompatible con cualquier comisión de apertura o similar
- No es aplicable en los descubiertos por valoración
- No puede adeudarse más de una vez, aunque se generen varios descubiertos dentro de un mismo período de liquidación
- En estos casos, tu banco debe informarte con todos los datos necesarios para que puedas comprobar que lo que pagas es lo correcto.
- Además, no te puede cobrar cuanto quiera: el coste del descubierto tiene como límite máximo dos veces y medio el interés legal del dinero.
- Hay situaciones que no deben producir un descubierto en cuenta: el cargo de comisiones en cuentas inactivas, o la ejecución de un embargo.
Un consejo: si no quieres que tu cuenta se quede nunca en descubierto, solicita a tu banco por escrito que no te lo concedan.
Para saber más, consulta nuestra MemoriaAbre en ventana nueva